El Perdón

Decidí en este momento hablar de aquello que nos libera de esos rencores que atan y obstaculizan nuestro desarrollo: El perdón.

 

Cuando perdonamos, el principal beneficiado es uno mismo, pues el otro puede ser que nunca se de por aludido o simplemente piense que no hay nada que perdonar. Negarnos el perdón es detener nuestra vida. El perdón es parte de ese proceso del dolor, es el aprender y emprender una nueva marcha. Es el punto final a un pasado que ya no está, así, pierde su significado y se diluye. Nuestras heridas sanan con mayor facilidad y la paz inundará nuestro ser, es el darse uno mismo una nueva oportunidad... una oportunidad de vivir y ser feliz.

 

"Me libero de la amargura y resentimiento que alguna vez albergue dentro de mi. Estoy totalmente dispuesta a perdonar libremente a todo el mundo, a todo aquel que me haya herido de cualquier forma, la bendigo con amor y la perdono. Me desprendo por siempre de ese recuerdo. Nadie puede privarme de cualquier cosa que por derecho sea mio. Lo que me pertenece siempre volvera a mi. Si algo no me es devuelto, es porque no tenia porque serlo. Me motiva el amor."